top of page

'Ariel Ameijenda

Podrías contarnos cómo y cuándo comenzaste tu andadura como “Luthier”


Comencé viendo trabajar a mi padre, desde que tengo uso de memoria. Luego de niño haciendo pequeñas en su taller, donde pasaba la mayor parte del día ya que quedaba en la propia casa paterna.  Recién a los 18 años aproximadamente comencé a hacer mis primeros instrumentos.


Aprendiste el oficio de “Luthier” por tu cuenta?


Bueno al principio fue sin darme cuenta, pero ya de joven además de la experiencia que heredé de mi padre, busqué  algunos “complementos” como cursar la licenciatura en Musicología en la Escuela Universitaria de Música, y creo que mi tercer gran aprendizaje fue la restauración de instrumentos manufacturados por  los grandes Maestros del SXX como Simplicio, Santos Hernández, Esteso, Fleta, etc.


¿Nos podrías introducir en tus gustos y preferencias sobre maderas y filosofía en la construcción?


En mi juventud me gusto experimentar mucho, como es natural, tratando de “superar” lo ya establecido. Luego de los treinta y pico comencé a retornar al modelo Torres, y redescubrí un potencial que antes ma había pasado inadvertido.  Hoy día, pisando los cincuenta años de vida, me encuentro más fiel al modelo Torres que nunca. Reconozco que le doy una especialísima importancia a la graduación de los espesores de la tapa y la altura del Abanico, para lo que cuento con calibres que me permiten detectar errores en el rango de 1 sentécima de milímetro.


A pesar de ceñirme al modelo tradicional, empleo indistintamente tapas de Abeto o Red Cedar, de acuerdo a las preferencias de mis clientes. El tratamiento que le doy al Red Cedar, le da una cristalinidad poco habitual que los clientes captan  instantáneamente.  Para aros y fondo me manejo con bastante libertad. Empleo desde el Clásico Palo Santo de India o Ciprés a maderas poco comunes y con resultados muy interesantes como Black Acacia, etc.


Que buscas o das más valor en la construcción de una guitarra flamenca, el timbre, la potencia, la comodidad?


Te soy sincero, creo que la perfección y el detenimiento en cada detalle potencia directamente  cualquiera de esos tres aspectos. Cada parte de la guitarra tiene un material, un peso y un tamaño óptimo para la función que cumple. Respetando esa filosofía con rigor, se logra el máximo de potencial en cada rincón del instrumento lo que a mi juicio incide en el volumen por ejemplo. También hay que tener en cuenta que la construcción de una guitarra no lleva menos de 20 a 25 días de dedicación íntegra en la vida de un luthier. En ese lapso cada constructor le imprime parte de su personalidad y de su búsqueda.


En cuanto a  la comodidad, además del detenimiento en lograr una acción lo más baja posible, de un tiempo a esta parte, vengo incorporando un radio muy leve en el diapasón de mis instrumentos que lo hace muy cómodo y anatómico. Te diría que una vez que se usa, difícil apartarse de él …


¿Que diferencias encuentras entre una guitarra clásica y una flamenca, en la construcción?


Dado que la función de cada instrumento es distinta, la construcción lo debe ser también.
Lo generalmente establecido es que la guitarra de Flamenco tradicional ( blanca) debe tener un sonido con un ataque fuerte, espontáneo y con poco sustain. Eso se lo logra con una construcción muy leve en cuanto a espesores y materiales empleados. De allí que el Ciprés para aros y fondo sea la opción más usada.


También la acción de las cuerdas ( la altura con respecto al diapasón) es mucho menor para lograr mayor comodidad y velocidad de digitación además de colaborar en ese timbre característico y como consecuencia, en el momento de alinear el diapasón hay que poner especial atención.

 

¿Qué crees que busca un cliente cuando se dirige a ti para comprar o repara su instrumento?


Para reparar, los mas de treinta años de dedicación y experiencia. Cuando vienen a  comprar un instrumento, vienen a buscar el sonido que me caracteriza y nadie mejor que mis clientes para definirlo. Se lo pueden ver en la sección Opiniones de mi sitio web.


Gracias por tu tiempo. Antes de despedirnos, hay algo que quieras añadir?.


Un abrazo y a las órdenes.
Ariel.

bottom of page